jueves, noviembre 05, 2009

Sin nombre

Soñó que era un pintor, quien caminaba por un desierto donde encontró
dos cactus:

Uno tenía un dibujo con una firma llamada paz que estaba muy dañado con
espinas,que destruían a las personas que estaban en sus casas, a otras que
jugaban en un parque, algunas rezaban, quizás otras dormían. Sus
lágrimas movían la pintura dándole un color oscuro como el humo.
Destellaba sufrimiento.

El segundo estaba nombrado hambre, con espinas unidas convirtiéndose en
una pared que separaba a personas como fronteras de países, que negaban
satisfacer sus apetitos. Mientras en otras partes abundaba el oro por
quienes descubrieron que una tijera es capaz de cortar una espina.
Destellaba ambición y amargura.

En su bolsillo encontró un pincel y decidió hacer modificaciones.

Quito cada espina y en la paz pinto una muralla protectora contra
ataques de nuevas espinas, Cambio esas lagrimas por sonrisas y aquellos
rezos recibieron respuestas de amor eterno. Destello consuelo y un gran
anhelo.

En el hambre aquel pintor creo una gran tienda donde el mayor oro es
comida sin precios, puertas sin niveles sociales. La ambición cambio su
nombre a filantropía y amargura se llamo felicidad.


Ilusiones y esperanzas de cambiar lo imposible, es tan fácil cambiar el
mundo en la imaginación, lo inalcanzable puede ser revertido, pero
antes auto cambiar y podrá crearse un lugar mejor ante los ojos. Como
se actúa el mundo actuara.

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